lunes, septiembre 27, 2010

VIVEME

"No necesito más de nada ahora que me ilumina tu amor inmenso por fuera y por dentro...créeme porque esta vez no acabará más.

Hay gran espacio ante tu y yo, cielo abierto que ya no se cierra a nosotros dos, que sabemos lo que es necesidad. Necesitas vivirme un poco más.

Víveme sin miedo ahora, sea una vida o solamente una hora, pero no dejes libre y desnudo este nuevo espacio que ahora es tuyo. Víveme sin más vergüenza, aunque esté todo el mundo en contra; deja la apariencia, toma el sentido y siente lo que llevo dentro.

Te has transformado en un cuadro dentro de mi que cubre mis paredes blancas y cansadas, sí y ahora en mi realidad tengo algo más que jamás tuve ayer.

Has abierto en mi las ganas de soñar, y siento que nos esperan días de una ilimitada dicha...

...por eso víveme sin miedo ahora, aunque esté todo el mundo en contra. Olvida la apariencia y simplemente siente lo que llevo dentro."

Esta es más o menos la letra de la canción que he elegido hoy para celebrar algo insólito en mi experiencia con las relaciones humanas: un año de amor. Nunca creí que iba a ser lo suficientemente fuerte y valiente ni que iba a llegar a sentir tanto por nadie como para alcanzar el lugar en el que me encuentro ahora pero, ya lo ves, aquí estoy, contigo, y hemos llegado tan alto que da miedo mirar abajo.

Pero a estas alturas ya he aprendido que para disfrutar plenamente del vuelo no hay que pensar lo lejos que está el suelo ni el tiempo que falta para aterrizar, y cada nuevo día de sonrisas y ternura compartida es por si mismo un regalo que no se puede perder poniendo la vista en el pasado cercano ni en el futuro próximo.

Nada más tus ojos en mis ojos, tu rostro en mi memoria cuando no te tengo cerca y tus manos en las mías cuando estás a mi lado.

Felicidades.

Aquí, el link de la canción: VIVEME., de mi queridísima Laura Pausini, que una vez más, pone la música y las palabras apropiadas para la ocasión.

La fotografía, el primer mar que vivimos juntos.


sábado, septiembre 18, 2010

NOCTURNIDAD



Acabáramos.
Me propongo escribir algo original para curarme un poco del asunto que tiene monopolizadas mis palabras creo que desde un año a esta parte ( no lo creo, es CASI un año, siii -musica apropiada para la ocasión-...pero hemos dicho que íbamos a dejar EL ASUNTO, seamos consecuentes ) y me encuentro con que aquí, aquí, y también aquí ya estuve dándole vueltas al asunto... de pronto me ha asaltado una idea inquietante y es si no habré estado describiendo círculos desde hace bastante tiempo y todo lo que estoy diciendo en el presente no lo habré
contado ya en algún sitio. He pensado en hacer el ejercicio y retroceder en el tiempo para comprobar si es cierto, pero en fin, me iba a llevar un rato, mi siesta es inminente y ahora, a mitad de una semana de noches que me tienen el humor oscuro y el ánimo a la altura del título del blog, no es el momento ideal para descubrir que uno tiene la cabeza vacía y en realidad no hay ahí dentro más que dos o tres ideas que se van haciendo los relevos de cara a la galería.
De todos modos, el investigador que hay en mi no resiste la tentación y se lanza a huronear en los textos de mi pasado como si se tratasen los textos de otro, porque es un poco así como lo siento cuando pasa el bastante tiempo. A veces me parece que "el otro" es mejor que yo, más listo, más majo, más ocurrente y más todo, en otras ocasiones me digo "caray, como se parece a mi este pedazo de capullo" pero siempre está ahí ese sentimiento de estar leyendo cosas sobre la vida ajena, y si lo pienso ese estatus de mirón impertinente en el que me meto cuando hago esta especie de contorsionismo retorciéndome para echar la vista atrás ( iba a decir "onanismo" más que contorsionismo porque hay un poco de autocomplacencia en todo el asunto, que me da gustito revisarme y releerme, vamos, y no sé si eso no es un poquito inmoral después de todo, ¿no?...hum...¿por donde iba?...)...pues eso, que ese cotillear a mi propio yo como si fuese una persona distinta igual es un poco enfermizo, una patología nueva a añadir a la creatividad recurrente esa de la que hablaba yo al principio ¡y que he comprobado!, porque si me descuido hoy calzo las mismas lamentaciones y los mismos chistes que hace tres o cuatro años.
Dios. Y todo esto es culpa de la nocturnidad, este estado pre-delirium tremens en el que circulo por la calle y por la vida enterándome poco o nada de lo que pasa alrededor y con esta línea de pensamiento tan terrible de la que acabo de hacer gala.
Jo. Tendría que haber cambiado de trabajo ya, en vez de seguir quejandome. Este mediodía echaban en la tele una prueba de triatlón y he pensado, a la vista del estupendo material que trota, chapotea y monta en bici en esas competiciones, que quizás debo hacer un curso acelerado de masajista y colocarme en ese sector, para atender a los deportistas al final de la prueba. Uff, es que justo salía uno ejerciendo sus funciones y vaya cara de estar poniéndose las botas tenía el tío...

A costa de esta interesante observación acerca de mi posible futura orientación profesional viene esta foto, que justo es decir la dirección donde la encontré porque es bonita de verdad: http://www.suspensiones.biz/tag/copa-triatlon-2010
Si movido por un espíritu lascivo alguien pincha en el link inclinado a curiosear por si salen más chulazos en mallas pegándose la paliza del siglo, debo decir que ya lo intenté y no hubo forma...
La foto de la cabecera, lo único original de esta entrada, es de una noche de este verano, una más de nuestro verano de amor compartido...
...ajjjj, ¿pero no dije que no iba a hablar de esto?

sábado, septiembre 11, 2010

SEPTIEMBRE


Me parece que todos los años cuando llegan estas fechas me pongo a hacer reflexiones sobre el final del verano y las cosas que supone el que termine, porque una parte de mi conserva la certeza de que lo que no haya ocurrido ya, no va a ocurrir hasta que el invierno termine. Esto, claro, solo es válido para mi, a buen seguro la mayoría de la gente que habita en la misma zona del planeta que yo es más inteligente, está mejor adaptada a su entorno y sabe ver las oportunidades que la vida sigue dando, cuando llega el otoño con sus ojos melancólicos y también después, cuando las noches largas y frías del invierno se apoderan de todo y el mundo se inunda de oscuridad.
Y descartada la posibilidad de contar en mi material cromosómico con un gen de oso que me induce a la hibernación, o el de una nativa hawaiana que solo es feliz dando saltitos bajo el sol, ¿qué explicación le voy a dar a esta actitud mía de chiringuito playero que me hace bajar persianas y colgar el cartel de "cerrado hasta la próxima temporada"cuando llega esta época del año?...
...no lo sé. Quizás es Septiembre, con estos cielos que aunque conservan la luz me parecen llenos de un espíritu melancólico y hasta un poco trágico, ese que tanto me estimula el alma y las palabras...
Te miro, me miro y pienso en el invierno que nos viene. Si cuando abramos los ojos con el primer sol de primavera, seguirás estando a mi lado. Como si en vez de un tránsito invernal nos embarcásemos en una nave interestelar de esas que van a galaxias desconocidas y tu y yo, exploradores intrépidos, estuvieramos a punto de entrar en las cámaras de animación suspendida para pasar el viaje de años luz que nos espera. Y es que aunque ahora no me cabe duda de que cuando abra los ojos y gire la cabeza serán tus ojos lo primero que veré, siempre quedan incógnitas por el camino, tormentas estelares, asteroides malditos que impacten con nosotros y-y-y-...
...
...y no pasa nada." Tranquilo, muchacho", me digo. No vas a viajar por las estrellas, solo tendrás que cruzar un invierno sin moverte siquiera de ahí donde te encuentras, y no habrá hibernación, podrás despertarte en medio de la noche y poner la mano sobre su espalda para saberle cerca, y abrazarle para sentirle respirar. No será un sueño artificial inducido para sobrellevar una criogenización de larga duración, te volverás a dormir y al despertar, aunque el frío empañe las ventanas y la lluvia golpee los cristales dibujando con sus gotas caminos que no van a ningún sitio, al despertar tenderás de nuevo la mano y ahí estará su espalda, justificándolo todo.
Ahora vuelve a mirar el cielo.
Sonríe.
Abraza Septiembre.



sábado, septiembre 04, 2010

CUANDO EL AMANECER TE ARREBATA DE MIS BRAZOS


...yo que desde que puedo recordar siempre he huido cuando llegaba el momento de los besos por compromiso, que acotaba estrictamente mi espacio vital mínimo necesario y escapaba como de la peste de esa gente que para hablar con uno parecen necesitar estar tocándote algo todo el tiempo, y de los sobones y sobonas, y los besuqueadores y abrazadores compulsivos que abrazan por abrazar sin poner nada de sí en cada abrazo; yo, ese mismo yo, ahora suspira porque apoyes tu cabeza en mi regazo, porque me cojas de la mano cuando hablas, porque me abraces y hasta bailar abrazados si hace falta; por besarte y que me beses, por tus caricias distraídas, vacías de intención pero llenas de ternura, y el roce casual de tus dedos, y ese roce también exquisito y detallado del momento en que me amas; ese yo se ve hoy deseando tenerte así de cerca, muy cerca, y sintiendo ese dulce y sordo dolor por la mañana, cuando el amanecer te arrebata de mis brazos...