domingo, mayo 14, 2006

DESDE QUE TU TE HAS IDO


Alguien dijo una vez,en alguna de las páginas maravillosas que forman este círculo con deseo de crear belleza (creo que fue la querida voz que unas veces me canta y otras me susurra desde el Sur del Mundo), que a veces nuestra experiencia en la montaña Brokeback es tan intensa que todos los días hay detalles que nos la recuerdan: una flor creciendo en la cuneta, el color del cielo por la mañana, una mirada de cariño, una sonrisa amable... y como no, las canciones. Yo he elegido esta vez una que me conmueve especialmente, y que se me ocurre podría enviarle a Ennis del Mar para que tuviese una manera de expresar esos sentimientos que tanto le taladran y duelen en el corazón. La canción es de Cecilia, una cantaautora española fallecida prematuramente en los años 70 pero que se adelantó a su tiempo de una forma increíble. Como decían en la promoción de no me-acuerdo-quien, "conoces más canciones de Cecilia de las que tú crees": "Un ramito de violetas", "Dama Dama", "Nada de Nada", "Mi querida España"... Aunque algunos temas puedan reflejar situaciones de la España de hace cuarenta años que hoy nos resultan ajenas, sus canciones puramente de amor trascienden el tiempo y el espacio. O eso pienso yo...

Desde que tu te has ido

Desde que tu te has ido
desde que te has marchado
mis manos tienen frio
por no tener tus manos

desde que tu te has ido
desde que me has dejado
yo solo soy la sombra
de aquella que has amado
Y en mi jardin pequeño
de sueños y esperanzas
hay un rumor a invierno amor
sin ti no tengo nada
Hay un rumor a invierno amor
sin ti no tengo nada...

Desde que tu te has ido
desde que me has dejado
en esta casa nuestra
es que me falta algo
no se si es el aire
no se si es la luz
pero cuando miro amor
se que me faltas tu.

Si de tus labios tiernos
bebi todo mi canto
ahora y en silencio amor
quiero llorar mi llanto
ahora y en silencio amor
quiero llorar mi llanto.

La letra es bonita, pero con música ya te hace pedacitos el corazón. Que sirva de homenaje a todos los que os acercais a mi casa y dejais esas palabras hermosas que me hacen florecer cada mañana, con cada una de ellas mis ramas se estiran más y más, a veces me parece que voy a poder tocar el cielo...